martes, 2 de abril de 2019

Encina indómita (2016)


Orgullosa se yergue la encina sobre el rico y húmedo terreno. Alta y frondosa, busca con su verdeada mirada los rayos del sol.

En su corteza endurecida ya han desaparecido las marcas de la triste y espinosa enredadera que osó, hace un tiempo, robarle la luz: la bella encina, embelesada por el intenso fulgor de una rosa, desvió su mirada del sol y se posó sobre los suaves pétalos que le ofrecía la punzante compañera. Sigilosa y decidida, se retorcía y enredaba sobre su tronco, mientras ésta, cabizbaja su verde cabeza, se distraía con la rosa. La dulce fantasía de la encina quedó interrumpida: el afilado abrazo de la enredadera se clavaba firmemente sobre su tronco, amenazando con llegar a la lozana cabeza de rígidas ramas.

Estaba en su indómita naturaleza amar la luz. Fue así como, olvidando el encarnado brillo de la tramposa rosa, fijó de nuevo la cetrina mirada sobre el sol. Imponente y hermosa luce hoy su robusta figura, bañada imperecederamente por la luz. 



Gamusina

 Dones veu a les dones? (2016)




No hay comentarios:

Publicar un comentario